Juicio laboral

Las arcas de Sud América en jaque

Hace un año, el Club Sud América “empezó de nuevo”. Tomó las riendas de la institución la actual comisión directiva que conduce José Ferreira y a partir de ese momento, comenzaron a transitar el lento camino de la recuperación.

Hubo que hacer frente a un montón de erogaciones. Deudas con los proveedores de agua y luz, sueldos, y las reparaciones edilicias necesarias como para poder funcionar. Como respaldo, un flaco padrón societario y muchas ganas de trabajar de los nuevos directivos.

Se apeló a todo recurso que estuviera al alcance, hasta se acumuló papel para vender. Se reactivó la actividad deportiva y se buscó captar nuevos socios. Así de a poco se fue saliendo a fuerza de pulmón, porque se tocaron muchas puertas de políticos, pero solo respondió el senador Javier Mor Roig.

Parecía que el 2011 iba a ser puro crecimiento. No era difícil soñar, pero el camino de las instituciones de barrio está plagado de obstáculos y en el de Sud América apareció uno bastante difícil de sortear. La institución deberá pagar un juicio laboral. Una vecina del club, que supo integrar varias comisiones directivas le inició acciones legales a la institución en el año 2005 y ahora, al ser convocados a una conciliación, la entidad acordó pagar una deuda de 36 mil pesos (que en un principio orillaba los 60 mil pesos), más accesorias y costas, en 41 cuotas mensuales.

Según nos contó la señora María Rosa Bordagaray, la demandante, junto a su esposo y sus hijos, estaban muy ligados a la actividad del club. “Ella fue secretaria y tesorera de la institución al mismo tiempo, y hasta desarrolló tareas administrativas. Hace unos años, reclamó que se le pagaran los aportes y esto generó su distanciamiento. La anterior comisión directiva la inscribió en la AFIP, pero no aceptó aportarle en forma retroactiva los 16 años que ella reclamaba. Fue por eso que inició acciones legales”.

El presidente José Ferreira dijo “Cuando nosotros asumimos, nos enteramos del juicio y pensamos que al no estar más la gente con la cual ella se había enfrentado, la fuimos a ver. Queríamos decirle que el único perjudicado iba a ser el club y no los miembros de la CD anterior, pero no obtuvimos resultados positivos”.

Finalmente, el pasado 8 de octubre, en una larga reunión, la entidad aceptó la propuesta de la demandante, por lo que en el término de 5 años deberá abonar los 36 mil pesos más otros gastos, por lo que desembolsará 44.800 pesos.

Sud América tiene en su camiseta el color verde, el verde esperanza. Ese color que templa y da fuerzas para seguir. Aldana Romano, la secretaria del club nos dijo “Es como volver a empezar, pero ahora estamos más sólidos, hay más gente que colabora y el club tiene vida. Mucha gente, de todas las edades viene a practicar deportes. El año pasado fue como empezar de menos 10. De todas maneras seguimos necesitando ayuda. Que nos aporten ideas para poder recaudar lo que debemos pagar por el juicio”.

Andrea Vodanovich manifestó “por suerte pudimos arreglar las canaltas antes que saliera lo del juicio, pero necesitamos hacer otras obras que son necesarias como los baños. Lamentablemente gasto imprevisto nos va a frenar bastante”.

Los directivos, además, pidieron tolerancia a los vecinos que se puedan sentir molestos por los ruidos que se producen durante la actividad que se desarrolla en la institución, a la vez que denunciaron que frecuentemente “se arrojan piedras al techo del gimnasio, cosa que puede resultar peligroso porque puede causar lesiones y a la vez, constituye un delito”.