Ahora se vende
Grande fue la sorpresa para algunos automovilistas, que estaban acostumbrados a bajar el vidrio de la ventanilla y estirar la mano, para "garronear" el diario, sin ni siquiera dejarle una propina al repartidor. Taxistas, remiseros y otros ases del volante, disfrutaron de las mieles del diario gratis durante un buen tiempo, pero días pasados, se quedaron sacando la mano "como para ver si llueve", porque el habitual repartidor les comunicaba con una sonrisa "ahora lo vendemos".
Unos poquitos, por vergüenza, pelaban la moneda bicolor y se hacían los "dolobu" como cuando haces un gol en off side, pero otros seguían viaje masticando bronca.
Dicen las malas lenguas que la culpa la tiene Cristina. si, Cristina, esa que a veces la encontrás en Balcarce 50, porque no tuvo mejor idea que anular el rubro 59 de los avisos clasificados, fuente inagotable de divisas para la prensa escrita. ¿Será cierto?.
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